Los manteles resinados no necesitan lavado constante

Los manteles resinados no necesitan lavado constante. Son fáciles de limpiar rápidamente con un paño húmedo. Solo necesitas un poco de agua con jabón y su mantel estará como nuevo.

En comparación, los manteles de tela requieren lavado a máquina y planchado para mantener su apariencia. Las manchas en los manteles de tela a menudo son permanentes porque las fibras se tiñen, haciendo que el color no se pueda eliminar.

Manteles Resinados: Elegancia y Resistencia

El mantel resinado está hecho de un tejido tratado con una capa o más capas acrílicas, lo que lo hace resistente al agua y a los líquidos. Esta capa protectora se encuentra sobre las fibras del tejido, permitiendo que el mantel resista derrames sin perder su apariencia. Sin embargo, es importante limpiar los líquidos derramados inmediatamente con un paño húmedo, ya que dejar líquidos por mucho tiempo puede dañar la capa acrílica y permitir que estos penetren en las fibras del mantel.

Los manteles resinados quedan lisos y sin arrugas

Los manteles resinados quedan lisos y sin arrugas, eliminando la necesidad de planchado. Además, la capa acrílica que recubre el mantel no soporta altas temperaturas. En lugar de planchar, es mejor enrollar el mantel en un tubo cuando no esté en uso para mantenerlo en perfectas condiciones.

Un mantel resinado protege su mesa

Un mantel resinado protege la mesa contra el agua y los líquidos, lo cual es una gran ventaja si tiene una mesa de madera, donde las marcas de agua son comunes. Además, un mantel resinado también protege contra arañazos y marcas, manteniendo tu mesa en perfectas condiciones.

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